El Sistema de Salud Cubano debe seguir siendo un paradigma para el mundo

El doctor Roberto Morales Ojeda, ministro de Salud, manifestó que las transformaciones realizadas han cumplido los tres grandes propósitos trazados

(Por Ana María Domínguez Cruz / Juventud Rebelde)

El impacto de las transformaciones necesarias en salud en los servicios hospitalarios del país fue un tema esencial en el debate de la Comisión de Salud y Deporte del Parlamento Cubano en la mañana de este domingo, a partir de los resultados expuestos de la fiscalización realizada por la diputada Ileana Fresneda Cárdenas en Pinar del Rio, Sancti Spíritus y Las Tunas.

El doctor Roberto Morales Ojeda, ministro de Salud, manifestó que las transformaciones realizadas han cumplido los tres grandes propósitos del Sistema de Salud Cubano.

«Trabajamos para mejorar cada vez más el estado de salud de la población cubana y los indicadores muestran un comportamiento favorable en sentido general, y estamos en condiciones de obtener mejores índices como el de la mortalidad infantil y materna.

«La estadía hospitalaria, los indicadores de sepsis intrahospitalaria y quirúrgicos mejoran, y ello es un ejemplo de que estamos haciendo un buen trabajo, todavía insuficiente».

Velamos por el cumplimiento de nuestro segundo propósito referido a la calidad de los servicios y la satisfacción del pueblo, agregó Morales Ojeda, quien precisó que aún persisten problemas en la infraestructura hospitalaria pero el cumplimiento de los protocolos, las guías de buenas prácticas, las medidas establecidas es una prioridad en nuestra labor diaria.

«El programa de reparación y mantenimiento de instalaciones debe ser cada vez mejor para que una institución hospitalaria no ofrezca un servicio deficiente por un problema de abasto de agua o de iluminación.

«Debemos lograr al 100 por ciento la presencia de insumos y recursos en los hospitales para evitar que los pacientes y sus familiares lleven su avituallamiento por falta de este. Y no se trata de una quimera pues tenemos los recursos para hacerlo.

«Podemos eliminar los roperos centralizados en los hospitales y que sean los trabajadores de la institución los que provean a los pacientes de lo que necesitan para su estancia. Hay que ser más estrictos para que no se violen en algunas instalaciones hospitalarias el horario de visita establecido, incluso por deficiencias en la alimentación que ofrecemos, que debe mejorar.

«Lo más importante es que tenemos que mantener nuestro sistema de salud pública con eficiencia y ser un paradigma para el mundo, como lo hemos sido hasta ahora». Tercer propósito, hacerlo todo con eficiencia.

Vamos bien, pero todavía falta

En presencia de los diputados y otros asistentes a la Comisión de Salud y Deporte, el doctor Alfredo González, viceministro de Salud encargado del área de Asistencia Médica, enfatizó que el proceso de transformaciones del Sistema de Salud se inició desde 1959 para lograr su cobertura universal, acceso gratuito, social y regionalizado, y tuvo como prioridad, en una primera etapa, la atención primaria de salud, en tanto es el primer eslabón del sistema al que deben acudir las personas necesitadas de atención médica.

«De los 219 hospitales existentes en el país hoy contamos con 151, además de las unidades de subordinación nacional, con una capacidad de 40 318 camas, y esa reducción se corresponde con un uso racional necesario de los recursos, sin que ello afecte la respuesta a la demanda creciente de los servicios de salud y la premisa de avanzar en la eficiencia y sostenibilidad del sistema.

«Trabajamos constantemente en el rescate del método clínico con enfoque epidemiológico y en el logro de la calidad en la asistencia médica que se brinda pues la satisfacción de la población es el resultado de nuestras acciones diarias».

«La proyección comunitaria de las especialidades, el sistema de las guardias, la regionalización asistida y la reposición e introducción de tecnologías son aspectos esenciales en el proceso de transformaciones en los servicios hospitalarios».

El vicetitular reveló que se tiene un presupuesto de 60 millones de pesos para garantizar la adquisición de equipos médicos imprescindibles para los servicios, cifra que se incrementará en el 2016.

Perfeccionar y mantener los servicios que ofrecemos como turismo de salud es esencial, destacó la diputada María Caridad Rubio, de la capital, en tanto es la cara de nuestro país ante el mundo. «Un prestigio internacional que hemos ganado y que no debe mancharse con deficiencias fácilmente evitables», destacó.

Fuente: Juventud Rebelde


 

Comenta esta nota:

Comentarios

Comentarios cerrados