Cuba resalta la necesidad de promover una colaboración internacional sin condicionamientos políticos

ESTADOS UNIDOS, 8 de febrero de 2016.- La Representante Permanente Alterna de la Misión de Cuba ante las Naciones Unidas, Embajadora, Ana Silvia Rodríguez, enfatizó, en la necesidad de cumplir los compromisos de la Cumbre Mundial sobre Desarrollo Social celebrada en Copenhague en 1995.

En el marco del 54 período de sesiones de la Comisión de Desarrollo Social, la diplomática cubana igualmente destacó que la erradicación de la pobreza es indispensable para el desarrollo, lo cual se requiere que los países desarrollados fomenten un entorno propicio.

“Es necesario llamar la atención sobre la necesidad de promover la colaboración internacional genuina y claramente orientada a abordar los graves problemas que enfrenta la humanidad, sin condicionamientos políticos” afirmó la representante permanente alterna.

Asimismo, resaltó la importancia de la Agenda 2030 para el Desarrollo sostenible y los grandes retos que tiene la humanidad para lograr su cumplimiento, cuando el gasto militar rebasa los 1,77 mil millones de dólares.

Por último, la Embajadora resaltó los avances de Cuba en materia de Desarrollo Social y el compromiso de la Mayor de las Antillas con la colaboración internacional. Esta se ha materializado a través del envío de médicos, personal de salud, maestros, entrenadores deportivos y otros especialistas para contribuir a la mejora de la calidad de vida de las poblaciones de otros países del mundo, beneficiando a los sectores pobres y marginados. Todo ello a pesar del bloqueo económico, comercial y financiero impuesto a la isla por más de 50 años.

La intervención de la Embajadora cubana tuvo lugar bajo el tema prioritario de la Comisión: “Reconsiderar y fortalecer el desarrollo social en el mundo contemporáneo”. La Comisión de Desarrollo Social tiene como mandato principal el seguimiento e implementación de la Declaración y Programa de Acción de Copenhague de 1995.

Declaración de la Representante Permanente Alterna de Cuba, S.E. Embajadora Ana Silvia Rodríguez Abascal, ante el tema 3 a)  Seguimiento de la Cumbre Mundial sobre desarrollo social y del vigésimo cuarto período de sesiones de la Asamblea General: tema prioritario: reconsiderando y fortaleciendo el desarrollo social en el mundo contemporáneo”.

Sr. Presidente:

Permítame felicitarlo a Usted y a los demás integrantes de la Mesa y expresar nuestro apoyo a la declaración formulada por Tailandia a nombre del G-77 y China.

Mi delegación considera que a más de 20 años de la Cumbre Mundial sobre Desarrollo Social celebrada en Copenhague, su Programa de Acción mantiene su relevancia y vigencia, tanto en el plano nacional como en el internacional.

La erradicación de la pobreza, principal camino para el desarrollo, sigue necesitando del cumplimiento de los compromisos acordados por la comunidad internacional en 1995, en los que los países desarrollados tienen un papel fundamental y diferenciado, de fomentar un entorno propicio que favorezca el desarrollo social de todos los pueblos.

Los informes que hemos examinado a lo largo de estos años muestran que los avances en la reducción de la pobreza aún son insuficientes y desiguales. Más de mil millones de personas viven en condiciones de pobreza crónica, cifra alarmante que nos recuerda cuanto debe hacerse todavía para lograr el éxito en la lucha contra el hambre y la exclusión social.

La comunidad internacional tiene ante sí ingentes desafíos: persisten y se acentúan las grandes desigualdades entre países desarrollados y en desarrollo; subsiste y se fortalece el injusto orden económico internacional, cuyo peso demoledor lo continúan cargando los países más pobres; se siguen aplicando sanciones ilegítimas, medidas coercitivas unilaterales y otras medidas económicas contrarias al Derecho Internacional, principalmente contra los países del Sur, que limitan e impactan negativamente en las capacidades de estos para alcanzar el desarrollo económico y social.

Coincidimos con el Informe del Secretario General en cuanto a que se favorece el desarrollo social con instituciones públicas abiertas, inclusivas y transparentes y en donde los gobiernos promuevan la participación y la rendición de cuentas. Sin embargo, nos parece igualmente importante promover con la misma urgencia la transparencia, la participación y rendición de cuentas en los organismos y organizaciones internacionales y en las instituciones financieras, cuya necesaria reforma para hacerlos más democráticos contribuirá a los objetivos del desarrollo social.

Sr. Presidente:

Mi delegación resalta la necesidad de implementar políticas públicas que fomenten los distintos aspectos del desarrollo social, tomando en consideración el rol fundamental que juega el Estado en esta materia, en coordinación con otros actores. Debemos impulsar políticas que favorezcan el desarrollo sostenible de nuestras naciones. Debemos promover que se tomen con la debida seriedad el cumplimiento de los compromisos de ayuda al desarrollo por parte de los países desarrollados.

En este sentido, es necesario llamar la atención sobre la necesidad de promover una colaboración internacional genuina y claramente orientada a  abordar los graves problemas que enfrenta la humanidad, sin condicionamientos políticos.

Hoy es una verdad innegable que la erradicación de la pobreza no depende únicamente del crecimiento económico de un país. Resultan indispensables tanto factores internacionales como nacionales para la creación de un entorno macroeconómico general que ayuden a erradicar la misma y contribuyan al logro del pleno empleo y el trabajo productivos.

Para que podamos cumplir la Agenda 2030 tendrán que prevalecer los principios de justicia social, equidad y respeto a los derechos de los pueblos y de cada ser humano.

Sr. Presidente:

Cuba otorga gran importancia a la Agenda 2030 para el Desarrollo Sostenible adoptada en septiembre pasado.

Mi delegación considera positivo y necesario que la Comisión de Desarrollo Social analice, según su mandato y funciones, cuál sería su papel y contribución a la materialización de la Agenda 2030, la cual brinda la posibilidad de renovar nuestro compromiso político en pos del desarrollo sostenible y la erradicación total de la pobreza.

Debemos trabajar en el marco de la misma para saldar las deudas pendientes de los Objetivos de Desarrollo del Milenio (ODM). Pese a los avances registrados en el cumplimiento de estos objetivos, todavía queda mucho por hacer; persisten grandes desigualdades dentro y entre los países y enormes desafíos para alcanzar el desarrollo sostenible.

Con un mundo en el que el volumen del gasto militar se ubica por encima de los 1,77 billones de dólares, los retos para el cumplimiento de la Agenda 2030 son grandes.

Sr. Presidente:

Cuba ha seguido avanzando en las metas de desarrollo fijadas a fin de preservar, ampliar y profundizar los logros alcanzados por nuestro país en materia de desarrollo social. Estos resultados han sido gracias a una obra sustentada en la preservación de la equidad y del bienestar, de la justicia y la dignidad, que nos ha permitido armonizar el crecimiento económico con el desarrollo social, sin dejar desamparado a ningún ciudadano, aún en los momentos más complejos y difíciles.

Ello ha sido logrado a pesar de la vigencia de un bloqueo económico, comercial y financiero que ha obstaculizado el desarrollo económico y social de Cuba por más de 50 años.

Pese a este obstáculo y a las dificultades económicas que Cuba enfrenta como país en desarrollo, hemos seguido concediendo prioridad al mantenimiento de la solidaria colaboración con otros países en desarrollo.  Ello se materializa con el envío de miles de médicos y otro personal de la salud, maestros, entrenadores deportivos y otros especialistas para contribuir con la mejora de la calidad de vida de poblaciones en otros países del mundo. Nuestra colaboración va dirigida a beneficiar a los sectores pobres y marginados. Nuestro modesto aporte ha permitido también la formación de miles de profesionales de numerosos países en desarrollo.

Por nuestra propia experiencia, consideramos que sólo concediendo la debida prioridad al desarrollo social, como centro de nuestras políticas públicas y asumiendo un firme compromiso con la solidaridad y la cooperación genuina entre todos los países, podremos hacer que las metas de desarrollo social de la Agenda 2030, alcancen un contenido real y un impacto positivo y concreto en la vida de millones de seres humanos, para quienes una vida digna y el acceso a servicios y oportunidades básicas sigue siendo una quimera.

Muchas gracias.

(Cubaminrex/ Misión Permanente ante Naciones Unidas)

Fuente: CubaMinRex


 

Comentarios

Comentarios cerrados