(Por Telesur)
Los diversos ataques y métodos utilizados por Estados Unidos no cumplieron el objetivo de derrumbar a la Revolución Cubana.
El reciente acercamiento de los Estados Unidos a Cuba por parte de la administración del presidente Barack Obama no es sino el reconocimiento del fracaso de la política del bloqueo económico, comercial y financiero, que fue establecido por el país del norte el 7 de febrero de 1962 a fin de subyugar al pueblo cubano a condiciones de existencia paupérrimas que han afectado también en las áreas de salud, educación, tecnología y turismo.
Occidente ha buscado doblegar y acabar con la Revolución Cubana en muchos intentos durante más de 50 años, además del bloqueo, han intentado invadir el país y han utilizado métodos de agresión biológica a los cultivos así como al ganado cubano.
teleSUR te invita a conocer cuáles han sido estos ataques a la Revolución Cubana
El intento de Invasión de Bahía de Cochinos
En el año 1961, La CIA había preparado dos planes para invadir a Cuba por vía de la fuerza militar compuesta por exiliados cubanos (Brigada 2506). El plan Original, llamado el Plan Trinidad fue elaborado por la CIA durante el gobierno de Eisenhower en 1960, y cuyo propósito era el derrocamiento de Fidel Castro. El Plan trinidad en principio avistaba el desembarco por Casilda, puerto adyacente a la ciudad de Trinidad (con aproximadamente 26 mil habitantes en 1961), de la mayor parte de la Brigada 2506, aproximadamente mil 200 hombres. El plan fue evolucionando pero no contó con el apoyo necesario por parte del presidente John F. Kennedy, quien pidió que dicho plan fuese modificado.
Durante tres días, la CIA elaboró el Plan Zapata. El lugar de desembarco se cambió a la playa Girón en Bahía de Cochinos, la cual estaba ubicada a 90 millas al oeste de Trinidad.
La artillería e infantería militar estadounidense desembarcaría de noche e intentaría controlar en principio la zona vasta de la Ciénaga de Zapata.
El 15 de abril de 1961 ocho A-26, con bandera cubana en el fuselaje, bombardearon los aeropuertos militares de Ciudad Libertad, San Antonio de los Baños y el aeródromo Antonio Maceo de Santiago de Cuba, y tuvo como resultado la destrucción de menos de la mitad de la aviación cubana. El fracaso del primer bombardeo provocó la cancelación del segundo que tendría lugar el 17 de abril. Con tal decisión, la Brigada quedaba totalmente desprotegida.
Ese mismo día, luego de aproximadamente cinco días de navegación ocurrió el desembarco de la Brigada 2506 en Playa Girón y Playa Larga con un total de 1200 miembros custodiados por sus buques. Tiempo después los invasores logran ampliar la zona invadida para así tratar de lograr el control de las tres carreteras de acceso al lugar. A pesar del avance que logra la Brigada 2506 no logra contar con el apoyo aéreo efectivo por parte de los Estados Unidos.
Para el miércoles 19 de abril, las fuerzas invasoras quedan totalmente rezagadas y cercadas por las fuerzas armadas cubanas y deben rendirse. La operación terminó con la derrota oficial de la brigada 2506 y con el fracaso de los Estados Unidos en la invasión.
Agresiones biológicas
El 2 de Junio de 1964 el comandante Fidel Castro manifestó la posibilidad de que el Gobierno estadounidense estuviese utilizando la guerra biológica contra Cuba. Tras esa declaración, se registró en los siguientes años en Cuba fiebre porcina, seudodermatosis nodular bovina, brucelosis del ganado, carbón y roya de la caña, moho azul del tabaco, roya del café, new castle y la bronquitis infecciosa de las aves de corral, conjuntivitis hemorrágica, disentería, y dengue serotipo 02, que provocó 158 muertos, incluyendo 101 niños.
El 15 de septiembre de 1981, en la inauguración de 68 Conferencia Mundial de la Unión Interparlamentaria, celebrada en el Palacio de Convenciones de La Habana, Fidel insistió nuevamente en la utilización de armas biológicas por parte de los EE.UU. hacia Cuba.
El sitio web de Granma reseña que en octubre de 1990, en el momento en que desarrollaban los planes de producción agrícola con motivo de apoyo para el programa alimentario y respuesta a las necesidades básicas de la población, extrañamente apareció la llamada «sigatoka negra», una enfermedad foliar en varios lotes de plátanos de distintas provincias. Meses después se detectó acariosis, enfermedad que acorta el ciclo de vida de las abejas.
En el año 1995, en el Aeropuerto Internacional José Martí de Cuba se descubrió en un equipaje de un científico extranjero tubos de ensayo con el virus de la tristeza del cítrico. Además, el 21 de febrero apareció la broca del cafeto, un insecto que difundió en varias zonas rurales de Santiago de Cuba, y coincidió con la visita de un grupo norteamericanos miembros de una Organización No Gubernamental.
Posterior a eso, se encontraron en La Habana focos de Aedes albopictus (tigre asiático) transmisor del dengue. En 1996 surgieron los primeros indicios de la presencia de la plaga Thrips palmi karny en cultivos de papa producidos por la Empresa de Cultivos Varios, en Jovellanos, Matanzas.
Durante la clausura del V Congreso del Partido del Partido Comunista de Cuba, el presidente Fidel pronunció: “Un especialista, miembro de un organismo internacional […] y presunto oficial de la CIA, en 1975 había realizado estudios sobre la enfermedad del dengue (serotipo 01), que azotó nuestro país en 1977 y obtuvo información sobre la no existencia de anticuerpos serotipo 02 de la enfermedad en Cuba. Por eso es tan importante, incluso, los datos relacionados con los anticuerpos que tiene el cubano, porque pueden ser utilizados para un tipo de guerra bacteriológica. […] estamos seguros de que durante un largo período de tiempo el Gobierno de Estados Unidos era responsable de estos hechos, […] porque ellos inventaron todo: cómo contaminar el azúcar que iba en los transportes de los barcos, cómo afectar el comercio, cómo afectarlo todo. […] Son muchas plagas seguidas contra cultivos esenciales: arroz, cítricos, papa, vianda, plátano, caña, café, tabaco, […] ¿Tenemos o no tenemos derecho a denunciar cuando ocurre algo de esto?”.
El portal Granma indica también que el Gobierno Revolucionario cubano hasta diciembre del año 2000 había tenido que gastar 2158 millones de dólares, más gastos adicionales cada año que rondaba los 59 millones de dólares para poder enfrentar las agresiones biológicas.
En el año 2002 el presidente estadounidense George W. Bush acusó a Cuba de desarrollar armas biológicas ofensivas, así como prestar conocimiento de estas a enemigos de EE.UU. Posteriormente en una rueda de prensa Fidel respondió: “En lo que se relaciona con las armas de destrucción masiva, la política de Cuba ha sido intachable. Nunca nadie ha presentado una sola prueba de que en nuestra patria se haya concebido un programa de desarrollo de armas nucleares, químicas o biológicas. Para los que no entiendan de ética, apego a la verdad y transparencia en la conducta de un gobierno como el de Cuba, podrían comprender al menos que hacer lo contrario habría constituido una colosal estupidez. […] Cualquier programa de esa índole arruina la economía de cualquier pequeño país; Cuba nunca habría estado en condiciones de transportar tales armas; cometería adicionalmente el error de introducirlas en combate contra un adversario que cuenta con miles de veces más armas de ese carácter, el cual recibiría, como un regalo, el pretexto de usarlas».
La política de hostilidad, bloqueo y agresiones de los sucesivos gobiernos de Estados Unidos, ha obstaculizado el derecho legítimo de los cubanos a los derechos humanos, así como a las libertades fundamentales como el derecho a la vida, la paz, la libre y al desarrollo.
Fuente: Telesur
Ver: La visita a Cuba del presidente Barack Obama
Comentarios